Para manifestar tus sueños, debes tener confianza y creer en lo que aún no ves.

La vida nos enseña cada día que la CONFIANZA es la herramienta principal para poder obtener grandes manifestaciones de prosperidad, abundancia, beneficios en nuestras actividades, en nuestras relaciones y sobre todo en nuestra vida diaria. Cuando movemos el engranaje de nuestros sueños desde la duda, los problemas, las faltantes, los miedos, los conceptos de otros, los sueños de otros, los proyectos de otros; es cuando se nos desequilibra la balanza y nos vamos a la parte más negativa que podemos tener; esto se agudiza con el tiempo, hasta llevarnos al punto de no querer seguir creando, proyectando y actuando para conseguir esas metas que en algún momento nos trazamos. Acá es importante que entiendas el concepto de CREER PARA VER y si hablamos de cómo se manifiesta y se materializa cada idea, debemos devolvernos en el tiempo y analizar el paso a paso que hicimos para consolidarla y ver una idea hecha realidad; este proceso muchas veces es innato o sin hacer mucho análisis que se obtiene, solo lo vamos consolidando con el tiempo casi sin percatarnos de ello. Pero ¿cuál es la diferencia entre hacerlo consciente o sin planificación?… Muy sencillo es la intensidad, la potencia y el tiempo que nos demoramos para ver los sueños manifestados. A continuación te sugiero un paso a paso que yo utilizo frecuentemente y desde pequeña para programar mi energía en función de las acciones que tomo para concretar mis sueños e ideas con actitud positiva: Manifestar tus sueños es posible. Primero, debemos imaginar lo que queremos conseguir; debe ser algo que nos anime a llevar nuestra vida a otro nivel, que nos emocione, nos llene el corazón y vibremos intensamente con ello en cualquier momento. Cuando estamos pensando el cómo sería a futuro, estamos creando en un campo etérico dimensional diferente al físico; es como estar construyendo las bases de un edificio donde todo empieza en un concepto, idea o necesidad. Te digo que solo pensando no se hacen las cosas por arte de magia, hay que ser constante y perseverante en el accionar y en la construcción con cada ladrillo o estructura que adicionamos para que sea fuerte nuestro proyecto.

Segundo, debes iniciar a escribir una lluvia de ideas, casi como un diario, escribe todo lo que se te ocurra, lo que estás imaginando y múltiples opciones de esa misma idea. Sabes que es muy importante escribir tus sueños en todos los campos de tu vida, bajar del “disco duro” los archivos que tienes y han estado por años en tu cabeza. Esto tiene que ver mucho con las estrategias que se usan en las empresas para desarrollar proyectos, desde los más pequeños, hasta los más robustos. El escribir hace que visualicemos la idea y comencemos a llevar a nuestra dimensión física, eso que ya creaste en el paso anterior, empezarle a dar forma a las ideas. Tercero escribir las estrategias para empezar el desarrollo de tu idea. Qué necesitas para desarrollar tu sueño e idea, quien te puede ayudar, que información debes consultar, que debes modificar en tu vida, que debes dejar de hacer y como comenzar de otra manera, analizar, qué recursos necesitas, qué tipo de investigaciones debes generar, etc. Depende mucho de cuál información tienes y cuál te hace falta.

Cuarto, todo lo que escribiste lo debes poner en conceptos (palabras claves) y buscar imágenes que las representen claramente y poder lograr así un mapa conceptual y de referencia para recordar cada acción que debes generar y lo principal como se verá tu objetivo final. Recuerda que la mejor manera para crear y conseguir el resultado es sintiendo y visualizando como si ya estuviera en tu vida cumplido ese sueño.

Quinto, debes agregar tiempos en tu cronograma de trabajo con descripción de acciones diarias, semanales y mensuales hasta que tu sueño se cumpla por completo, lo más importante es poner una fecha estimada para conseguir el objetivo soñado. Recuerda que paso a paso se obtienen grandes resultados y metas con enfoque; nunca pretendas de un día para otro obtener algo por lo que no has trabajado o hecho acciones. Las recompensas siempre vienen con el tiempo y cada vez con mayores resultados. Siempre puedes replantear acciones que no estén funcionando, pero nunca desistir en tu propósito y tu felicidad. También quiero que entiendas que nadie hará lo que tú debes hacer por ti misma, la velocidad siempre la escoges tú y la energía que le quieres impregnar a cada día. Nunca olvides que el agradecimiento y la confianza en ti misma es la que te llevará a conseguir todos los sueños propuestos y los que aún están por venir. ¿Quieres una consulta online conmigo? https://www.dianaecheverri.com/consultorio